domingo, 18 de noviembre de 2012

Brilla, pero no para siempre.


Esta entrada está dedicada a todas esas personas de quienes la sociedad espera milagros. Si, para todas esas personas cuyo futuro está en grandes investigaciones, proyectos, empresas, etc. Personas que seguramente brillarán y serán conocidos en sus “campos”. Si su vida profesional, puede tener un camino llano de grandezas, pero hoy os dedico esta entrada, para que (espero) os deis cuenta de un grave error por vuestra parte, un error que no dejáis de cometer (evidentemente el hombre sí que choca varias veces con la misma piedra).
Muchos seguramente se sorprenderán: “¿Error? ¿Qué error?” Tranquilos que yo os lo digo con todo mi cariño y respeto. En lugar de mirar tanto para arriba y planificar vuestro futuro, observa a tus iguales, gente que estudia a tu lado una rama llamada “EDUCACIÓN”. ¡OH CLARO! Para vosotros no somos iguales, vuestra carrera, y futuro es más difícil, nosotros nunca entenderemos nada, solo somos una panda de vagos que queremos una vida fácil, y remunerada ¿Verdad? Vamos que llevamos lo que vosotros llamáis una vida inútil.
Bien pues yo os planteo una cuestión: ¿Por qué creéis que estudiamos esta rama? Evidentemente no por el salario, ¿Por el reconocimiento social? ¡AH, NO! Que somos unos vagos se me olvidaba. Venga yo os ayudo un poco. Estudiamos esta rama para poder enseñar a vuestros sucesores, que es más importante tener respeto y una propia personalidad, que premios inútiles que se pudren o se pudrirán en vuestras estanterías. Estudiamos esta rama para enseñarles que un buen triunfador trata bien a sus iguales e inferiores, y no a sus superiores.
Así que por mí, seguir así, que seguro que vosotros siempre sabéis el doble de educación que nosotros, que es nuestra especialidad, ¡Que digo educación! ¡Sabéis el doble de todo vamos! Si, seguir así, demostrando que solo valéis para pisaros entre vosotros, porque estoy seguro que alguien con menos inteligencia, pero más corazón siempre os superará.
Esta lección, queráis o no aceptarla, os la está dando lo que vosotros llamáis, “uno de esos vagos inútiles”. 

miércoles, 14 de noviembre de 2012

La antigua y falsa isla.


Cuando el barco con mascarón de lobo llegó al puerto de la gran isla, nuestro capitán cubrió su rostro con la capucha blanca. No quería que nadie le reconociera. Pues fue en esa isla donde comenzó su aprendizaje, donde recibió el barco, de donde se alejó para luchar, donde comenzó la gran guerra, ya acabada afortunadamente.
Su tripulación, contenta de poder descansar de tan largo viaje, se dirigió junto a los segundos de a bordo  a la taberna. Él, sin embargo, comenzó su marcha hacía el bosque. Dejando atrás poco a poco el pueblo. Le gustó entrar en la espesura del bosque, tranquilidad, naturaleza, y vida, no había ruidos extraños, ni problemas, solo el silencio roto por el canto de los pájaros.
Cuando por fin llegó, la puerta de metal, se abrió antes de que pudiera siquiera tocarla. Cualquiera en esa situación, es hubiera llevado un buen susto, pero él simplemente sonrió y penetró en el castillo. Una extraña sensación recorrió su cuerpo. El castillo estaba igual físicamente, pero su interior, no se parecía en nada al que él recordaba. Quizá el nuevo señor del castillo tenga una nueva forma de ver las cosas, pero seguía siendo eso, un hombre normal y corriente, y nuestro capitán no  había hecho tan largo viaje para dar media vuelta.
Así que sin más dilación, pico a la puerta de la gran habitación, y tras un “adelante”, entró. Por fin lo veía el famoso señor del castillo, tan respaldado, tan famoso. Allí sentado, sonriente, y mirándolo como si fuera un viejo amigo.
-Ya me estaba preguntando, porqué tardabas tanto en visitarnos.
-¿Me esperabas? -Pregunto nuestro capitán sorprendido.
-¡Ya lo creo! Tus aventuras en el mar no caen en sacos rotos, y vuelan a una rapidez increíble. Llevo meses siguiendo tu pista, y al final eres tu quien encuentra nuestro barco.
-¿Barco? ¿Será isla? -Preguntó extrañado el capitán.
-Joven, aunque en la gran guerra estuviéramos en bandos diferentes, deja que te enseñe una lección que tus maestros no te han demostrado. No porque no quisieran, sino porque no debían. Mira por la ventana el mar, por favor.
El capitán cauteloso se quitó la capucha y miró… ¡Eso lo explicaba todo! La razón de que tardaran meses en encontrar de nuevo a la isla, era que… no era una isla, ¡Era un barco inmenso! Que se deslizaba por el mar lentamente. Eso explicaba el por qué nunca habían sufrido un ataque, pues nunca estaban en el mismo lugar. El señor del castillo, al ver la cara de incredulidad del capitán, soltó una sonora carcajada.
                -¡¿¡No te lo esperabas verdad!?! Jaja.
                -Pues no la verdad –admitió el capitán.
                -Bueno ahora escucha, sé porque has venido, si también lo sé –Añadió al ver otra vez la sorpresa del capitán – Tu tripulación, y tu barco son bien conocidos aquí. Mira, el gobierno central todavía no quiere dejarte volver de forma permanente, quieren que sigas manejando el barco con el mascarón de lobo como hasta ahora. Esta situación cambiará pronto, solo tienes que esperar una jornada más. Esa es lo único que te puedo decir por el momento. La verdad que lo siento, pero yo solo cumplo lo que me ordenan.
                -Bien, bueno no te preocupes, la verdad que me esperaba otra cosa, pero por lo menos no acaba aquí mi labor. Espero que no te importe, que mi tripulación y yo, nos quedemos una noche aquí, solo para descansar y comprar cosas necesarias para el viaje.
                -Solo con la condición, de que cuando salgas del castillo, no te vuelvas a poner la capucha, durante tu estancia aquí. Aquí estas en territorio aliado, no la necesitas.
El capitán rió, y tras despedirse, comenzó su descenso por el bosque, hacia la taberna del pueblo, donde estaba toda su tripulación. Sin saber que al llegar, recibirá una bienvenida que le marcará una sonrisa para toda la semana.

jueves, 1 de noviembre de 2012

El horario, con sangre entra.


Lectores, y lectoras, ayer he tenido la desgracia, o el placer (todavía no lo tengo claro) de tener que discutir no solo una vez, sino que dos, el tópico de la educación actual.
El término educación, es bastante amplio que duda cabe, pero hoy al igual que ayer voy a centrarme en ¿Qué tipo de educación reciben las nuevas generaciones? no solo hablo dentro del ámbito de la escuela, sino que también del familiar.
Los niños que hoy corretean por los colegios, a parte de todos los conocimientos y trabajos que reciben en el centro (creerme que no son pocos, que dan conocimientos cada vez más avanzados a su edad), se ven metidos en un sin fin de actividades llamadas “extraescolares”. Pues claramente el inglés es bastante importante (más bien necesario), pero claro, a parte de eso, el niño realizará por ejemplo: futbol, piscina, kárate, o tenis, lo que se, y eso hablando de dos actividades, porque  si entro en los que  también tienen un instrumento y van a clases de música, o hacen teatro, etc, es un: ¡APAGA Y VÁMONOS! En serio ¿Los padres no se dan cuenta de que también van a tener exámenes y deberes? Qué si su niño el lunes y miércoles tiene inglés y futbol (por ejemplo), y el martes y jueves música, o tenis ¡DA IGUAL! El pobre crio cuando llegue a casa ¡¡¡NO SE VA A PONER A ESTUDIAR!!!
Les propongo a esos padres que hagan un horario con TODAS las actividades del niño y cuando lo tengan, miren cuanto tiempo tiene su “peoncita” para estudiar: ¿después de comer, con la comida en la boca? o no espera mejor, después del entrenamiento cuando venga reventado.
Hago un llamamiento a la cordura. SON NIÑOS, NO MÁQUINAS, así que no nos llevemos las manos a la cabeza cuando el pobre niño nos traiga 4 suspensas.
Y ya centrándome en la otra cara de la moneda ¿QUIÉN ES EL GENIO, QUE PENSÓ, QUE LOS DEBERES PUEDEN LLEGAR A SER MÁS ATRACTIVOS PARA LOS NIÑOS QUE JUGAR EN LA CALLE A CUALQUIER ACTIVIDAD? En fin, no hay palabras para semejante estupidez, porque claro todos los niños del mundo te dirán: “Buf, que rollo el salir a jugar, los deberes son más divertidos, ¡VOY A MI CUARTO A HACERLOS!”. No dudo ni un segundo en que se puedan convertir en algo un poco más atractivo, pero aceptemos de una vez, que son lo que son, DEBERES, y como niños que son ellos, la mayoría prefería tirarlos por la ventana.
Así que señores, no intentemos dar pasos de gigantes con piernas de humanos, que es mejor que avancemos poco y bien, que mucho y con semejantes lagunas.

El dinosaurio que no se extinguió.


El caminar de la calle era diferente aquel día. Se notaba desde la mitad del trayecto, pues la aglomeración de la gente solo se daba en la mitad de la izquierda de la acera. En tu mente resuena un “¡Qué raro!”. Pero tus piernas continúan caminando por el lado derecho de la acera. Y por fin, te encuentras con la fuente del “problema”, una pareja de chicos se basaban apasionadamente en el lado derecho de la acera, mientras a su alrededor la gente se apartaba con cara de pocos amigos, o apresuraba el paso con una risa burlona en su rostro. Pero ¡QUÉ ESTAMOS EN LA EDAD MEDIA!, ¡QUÉ MÁS DA QUE SE ESTÉN BESANDO! Es increíble como un país en pleno siglo XXI todavía guarde sus prejuicios pasados. SEÑORES DESPIERTEN que el dictador falleció hace muchos años, que somos un país libre, que en lugar de reírse o tacharlos de monstruos, deben apoyarlos y respetarlos, que son personas normales, con sentimientos. Puede que les atraigan cosas diferentes  que a mi y a ustedes, pero ¿y qué? por ello no dejan de ser mejores o peores personas.
Para terminar, solo me queda decir que ellos han demostrado tener el doble de personalidad que ustedes. REFLEXIONEN, ¿Qué tipo de vida tienen ustedes, si se están preocupando por cosas tan idiotas?